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Hecha la ley hecha la trampaLa convicción y el reclamo democrático de que la nación marche de acuerdo a sus leyes son absolutamente laudables y provechosos y hasta constituyen un principio defensor del orden y la paz social. Pero no hay que desconocer la existencia de un gran inconveniente en la conciencia de muchos argentinos. Esa seguridad y hasta ladiríamos táctica antidemocrática de que “hecha la ley hecha la trampa”. ¿Responde a experiencias vividas o es simplemente un recurso de toda oposición para realizar o preparar trampas futuras? ¿quizás manotazo de ahogado? ¿o tendencia irrefrenable de la conocida “viveza criolla”? Después de muchas movilizaciones, de una preparación con participación nunca fomentada como en esta oportunidad, de una larga discusión previa, de mutuas acusaciones como si nadie estuviera enterado de que cada sector tiene sus “mañas” y que los que hoy se quejan de borocotización, son los mismos que quedaron al descubierto por la compra de senadores para el logro de una ley, se sancionó finalmente la Ley de medios esperada desde hace 25 años. Las aclamaciones populares frente al Congreso excedieron en su expresión al triunfalismo mostrado por el sector agronómico con el triunfo de un voto, el de Cobos, para anular la disposición 125. Adentro la mayoría llegó casi a las dos terceras partes. Todo esto da sensación de que verdaderamente se trata de un triunfo de la democracia. Pero, no hay que disminuir las capacidades del enemigo que es muy poderoso y no tiene únicamente raíces nacionales. Ya están sobre la mesa los propósitos de la trampa. Llevar a la justicia la inconstitucionalidad de la ley. Además cada una de las grandes empresas abroqueladas, en sus privilegios pondrá obstáculos de toda clase para que avance el cumplimiento de las disposiciones establecidas. De manera especial se ocuparán de producir despidos. Ya lo han anunciado sin ningún pudor. La acusación de que se trata de una ley K (como la calificaron con la misma astucia con que el sector agroexportador se calificó como “Campo”), y el propósito de que el nuevo Congreso la derogue o la transforme se esgrime amenazante. Y nuestro brillante diputado Aguad inventor de un artículo del reglamento que anulaba las sesiones especiales después de media hora de no logrado el quórum, habla de la exigencia ya, de que hable de la derogación después del 10 de Diciembre. El fantasma de que el gobierno nacional pretenderá cercenar la libertad de prensa desde PAPEL PRENSA , empresa en que tiene aproximadamente casi el 29 por ciento de las acciones, con temor de que quiera apropiarse del control total (ignorando todos los esfuerzos que el mismo gobierno está haciendo para vender sus acciones a particulares) está cobrando importancia mediática. Las condiciones para renovar las licencias vencidas, entre las que se cuenta una audiencia pública, son vistas como un recurso de la autoridad de aplicación (detrás de la que se espera, por lo visto, que estén siempre los Kirchner) identificadas con el proceder de Chávez y Correa que han procedido a negar la renovación a empresas claramente conspirativas, con su publicidad vendida a los intereses estadounidenses. La realidad es que se ha ganado una batalla pero persiste la incertidumbre de que dentro de tres años la guerra también resulte ganada por la democracia. Algo que no será seguramente si nos dormimos en los laureles. Si no continúan las movilizaciones que en estos últimos días han cobrado una actividad alentadora. Hay que destacar en este aspecto (como movilización modelo) el excelente y meritorio trabajo de la Coalición por una radiodifusión democrática, que dio su fruto en esos 21 puntos de los que difícilmente pudieron escaparse los opositores de la ley. Habrá que contar igualmente, con la firmeza sin cerrazón, de un gobierno (de cualquier signo) que deberá estar dispuesto al diálogo pero no a las concesiones que, siendo ganador lo hagan aparecer como perdedor, como ha hecho notar la ministra Giorgi calculando en casi treinta millones de pesos lo que el estado perdió en concesiones o más bien claudicaciones frente al Agro, desde Abril del 2008. La ley ya está promulgada. La trampa ya está también urdiéndose. Hay que estar alerta y ojalá esta vez no sea cierto en nuestro país que “hecha la Ley hecha la trampa” |
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