Alrededor de 140 personas en el Campo Scout.
Una verdadera fiesta.
Nos vemos el próximo domingo a las 12 hs.!!
No solo creyentes, sino creíbles. Mons. Pedro Casaldáliga
Alrededor de 140 personas en el Campo Scout.
Una verdadera fiesta.
Nos vemos el próximo domingo a las 12 hs.!!
Esta es la pregunta que muchos se hacen y nos hacen.
Algunos participaremos de las actividades de la parroquia y mantendremos los contenidos de la catequesis como hasta ahora. Veremos así cuán abierto y plural es el cura okupa.
Otros seguiremos con las actividades de La Cripta, sólo que ahora sin el edificio parroquial, cuyo dueño (el obispo) lo reclamo por la fuerza que le da el derecho.
Como dice la mundialmente reconocida biblista de Harvard, Elizabeth Schüssler Fiorenza, la jerarquía impone con la fuerza lo que no puede razonar teológicamente. Quizá por eso en el decreto de su nombramiento hay tantas referencias legales y nada de evangelio.
La agresividad y el fanatismo evidenciados por muchos de los que llenaron el templo y que no pertenecen a La Cripta, muestra la incapacidad de dialogar de este grupo de fanáticos, que para salvación nuestra, no pudieron quemarnos vivos como hacían en el medioevo.
Sin dudas, nada es más peligroso que el fanatismo religioso. Con Bin Laden vimos a dónde los lleva su ceguera y falta de inteligencia de la fe.
Por supuesto no hay mejor defensa que un buen ataque por eso salieron a mentir.
Mienten cuando afirmaban que éramos 14 y ahora mienten cuando afirman que somos 50. De todas maneras la validez de un argumento no se mide por el número de los que lo sostienen sino debatiendo. Cosa que estos cobardes no hacen.
Mienten cuando afirman que apoyamos el aborto. Sí sostenemos que no se puede imponer a una nación de múltiples creencias religiosas una manera de pensar. Por eso apoyamos una ley que garantice la posibilidad de que cada pareja decida según su conciencia. Y de paso, como su fuera menor, evitar miles de muertes de mujeres que porque no tienen el dinero no pueden hacerlo en clínicas privadas donde probablemente trabajan como médicos algunos de estos fundamentalistas. (Este será probablemente el debate del año y ya contribuiremos con lo mejor del pensamiento teológico actual para iluminar esta cuestión…)
Mienten cuando dicen que nos autodenominamos Sin Tapujos. Ese es el nombre de este sitio web como homenaje al libro de Quito. Nosotros fuimos, somos y seremos la Comunidad de La Cripta. Por ahora sin edificio.
Próxima reunión? Misa Dominical.
Lugar? a Confirmar. Probablemente en el Campo Scout de Quisquizacate. (A eso no lo pueden okupar porque no es de ellos! Ja!)
Más información en breve…
Ellos la tenían clara. Se vinieron en patota. Sabían que el enfrentamiento era severo, no por violento, por profundo. Era un día clave. Prepararon sus milicias. Estaban advertidos…”algo van a hacer”. Era cierto, no se equivocaron los informantes. Pero lo único que se quiso hacer fue decir la propia palabra. Pero ni eso toleran. Comenzaron con gritos, abucheos y de manera vergonzante, usaron el Padre Nuestro y el Ave María recitados marcialmente a voz en cuello, para intentar silenciar a los dueños de casa, a la comunidad de La Cripta que solo quería hacer oír su voz.
Fueron astutos como serpientes, como recomienda Jesús a sus discípulos. Fueron venenosos como serpientes y eso no lo recomienda Jesús. Nosotros fuimos mansos como palomas, como lo recomienda también Jesús. Pero bastante ingenuos y eso fue un error.
Ellos tienen todo el poder institucional y lo hicieron sentir. Hace varios meses que simplemente se quiere dialogar con Carlos Ñáñez el pastor de la Arquidiócesis sobre el perfil del sucesor de Víctor Acha, el párroco saliente. ¿Tan difícil es que la autoridad tenga en cuenta los criterios de una comunidad a la hora de elegir el sacerdote que será responsable de esa misma comunidad? No estamos hablando de “democratizar” los mecanismos de designación de los titulares de las parroquias, eso sería soñar demasiado, solo se quería ser parte en el proceso de designación. Esto, que la Cripta pedía, rogaba y al final exigía de su pastor y de sus colaboradores, debiera ser una práctica habitual, nada extraordinaria. No lo es. Todo lo contrario. El poder institucional no dialoga, dictamina.
Se quedaron con los ladrillos de La Cripta, como lo quiso señalar Quito Mariani y de manera burda, irrespetuosa, grosera, lo silenciaron con alaridos desencajados de arbitrariedad. Pero no se podrán quedar nunca con su aliento. Se quedaron con la mascarada institucional. No se podrán quedar jamás con su soplo. No negamos la importancia del lugar físico. Somos conscientes que ese aliento y ese soplo deben de alguna manera materializarse, para todos y todas que siguen viviendo esa iglesia “otra” y preguntarán ¿dónde están, cuándo se reúnen, dónde celebramos, dónde nos encontramos, cómo nos buscamos, cómo “seguimos andando”. Debe ser para nosotros un desafío indeclinable ofrecer respuestas.
“La Cripta no se negocia, la Cripta no se entrega” consignas absolutamente vigentes. La Cripta es un ícono de la iglesia de los empobrecidos. Es el “lugar” donde seguirá el Gran Espíritu invadiendo nuestros cuerpos y corazones. El capricho vaticano de arrasar con todos los vestigios de esta iglesia de base, popular, liberadora, fraterna no tiene futuro. Ese mismo día Benedicto XVI beatificaba a Juan Pablo II. Un intento más para disciplinar a los díscolos. Será inútil. Ya fueron advertidos en el Evangelio… “si ellos callan, gritarán las piedras”.
Fuimos ingenuos. Trataremos de no serlo más. Mansos si, también astutos.
2 Mayo 2011
El mejor camino para llegar (porque Ricardo Rojas está cortada por obras) es: por Martinolli hasta Buitrago (la calle asfaltada del Club del Banco Córdoba)allí doblar a la derecha y llegar hasta Ricardo Rojas en donde hacia la izquierda se cruzan las vías y se llega a calle Pachacutec (unos 300 mts. después de la del Vivero Arguello) por Pachacutec hasta el Nª 7962 (tranquera de madera) (dentro y fuera hay lugar para estacionamiento.
DAMOS IMPORTANCIA DECISIVA A ESTE ENCUENTRO.
Les rogamos contestar por Si o NO, a los correos de Daniel, Darío, Lucía, Raúl,Mariani o a través de la web.
Haremos Asamblea proponiendo los lugares que cada uno crea posibles y convenientes para decidir sobre los próximos encuentros; elegiremos junto al Concejo pastoral en ejercicio, personas o grupos que se encarguen de diversas tareas inmediatas; escucharemos propuestas de planes de futuro…
Concelebraremos la MISA con Víctor y Mariani. Es indispensable que cada uno comunique esta invitación por mail o teléfono a todos sus contactos.
De sus respuestas depende la decisión de HACER O NO HACER.
Nos dieron una lección de organización agresiva. Démonos una satisfacción de organización constructiva. Así el Judas podrá informar que seguimos viviendo y allá arriba, rechinarán los dientes.
TENEMOS QUE APROVECHAR ESTE MOMENTO DE UNIDAD EMPRENDEDORA.
El Consejo Pastoral de La Cripta en el Exilio
Domingo 1ro. de Mayo de 2011. A las 19 comienzan a descender de colectivos y automóviles, que paulatinamente van ocupando los lugares de estacionamiento y los alrededores de la Cripta, las dóciles ovejitas convocadas para una estampida.
Después, llegan los pastores, cada uno con su valijín portador de los sagrados ornamentos de su jerarquía. Y enfilan sin ninguna vacilación hacia las escaleras de acceso a la casa parroquial donde los está esperando el rabadán* mayor.
El encuentro para la toma de posesión del nuevo párroco está fijado para la misa de las 20. A las 19.30, la Cripta, con capacidad para 450 personas sentadas, se muestra atestada de gente que cubre hasta los pasillos. Son los fieles que acompañan al arzobispo Ñáñez y al nuevo párroco. Cuando van llegando pausadamente los integrantes de la comunidad parroquial se encuentran con la Cripta tomada. A duras penas pueden ingresar algunos, alrededor de 50, que deben acompañar a quienes desean expresarse públicamente en disconformidad con la decisión inconsulta del obispo de designar al padre Torres Aliaga como nuevo párroco. Detrás de la solemne marcha procesional de una larga fila de ministros revestidos con alba y estola (unos 20), el arzobispo, el actual párroco y el futuro, avanzan para colocarse en los lugares de cabecera del templo. Comenzada la celebración, un delegado lee el decreto de nombramiento del nuevo párroco. Después del canto pascual del Gloria, el presidente del Concejo Pastoral parroquial recibe el micrófono y saluda al arzobispo indicando brevemente la disconformidad de la comunidad. Religiosas que estaban presentes, en una cantidad aproximada de15 ó 20, inician en voz muy alta el rezo del rosario que todos corean prontamente con voces muy intensas, para acallar a los 6 laicos que, frente al altar siguen expresando sus derechos como laicos. Una intervención del padre Torres (eran sus fieles) logra un momentáneo silencio. Continúan expresándose los laicos y aparecen aislados los gritos provocativos. El más significativo y enérgico afirma “El obispo es el que tiene el Espíritu Santo y hay que obedecerle!” El arzobispo mantiene la cabeza baja y, fuera de los tics constantes de sus labios, mantiene una serenidad pétrea. Toma la palabra el padre Víctor Acha y señala su respeto a los laicos y sus derechos en la iglesia. Y habla también de su propia historia de fidelidad, advirtiendo que eso no excluye la manifestación de sus propios criterios. Añade que no concelebrará esa eucaristía, porque la comunión sería una ficción de la realidad. Y desciende del altar. Comienza entonces un éxodo de los integrantes de la comunidad local, abriéndose paso dificultosamente entre la multitud. Los sacerdotes presentes del grupo Angelelli acompañan al párroco saliente. Al comenzar este abandono del local, tomo el micrófono que está en reposo sobre el altar y, en un instante de silencio digo: “Algo muy simple. Esto es una invasión planificada. Pero, les dejamos la parroquia de Ntra.Sra. del Valle y nos vamos con “la cripta” a otra parte, para subsistir”.
La Misa se desarrolla después de acuerdo a las normas litúrgicas señaladas para la asunción de nuevo párroco, y la predicación del obispo reprueba, en base al texto bíblico, la ruptura de la paz por parte de los que se marcharon y la falta de actitud pluralista que él y los suyos, sí poseen.
Resultado: Un grupo de responsables de distintos aspectos pastorales en la Cripta continuará en sus puestos hasta ser desalojados, tratando de hacer respetar su condición de laicos maduros. El resto, en esta Iglesia que ha sido un tiempo la de Juan XXIII, del Concilio y de Paulo VI, y es ahora de Benedicto XVI, Juan Pablo II y el restauracionismo tridentino; la que ha proclamado ser comunidad fraternal y ahora es la del poder; la que debe ser del diálogo y es ahora del autoritarismo; la que aseguró ser defensora de los pobres y después condenó a todos los que trabajaron en serio por ellos; la que se presentó como servidora de ese mundo al que ahora rechaza y condena; la que defendió los derechos humanos y a la vez, aparece como cómplice privilegiada de las dictaduras represivas;… en esa iglesia seguimos sintiéndonos con derecho a estar, aunque disintiendo de la actual conducción y espíritu antievangélico. Y buscamos un espacio para seguir siendo La Cripta, comunidad que se esfuerza por seguir a Jesús de Nazaret.
* rabadán: jefe de pastores
José Guillermo Mariani (pbro)
Y sí, finalmente vinieron por la parroquia. Pero a nosotros sí nos importó.
Por eso les dijimos en la cara lo que pensamos y sentimos, lo que no tienen agallas para escuchar y mucho menos para respetar.
Representantes de la Comunidad de La Cripta hicieron oír su reclamo una vez más y luego se retiraron en masa.
Darío, Presidente del Consejo Pastoral.
Obispo Carlos, somos la comunidad de La Cripta expresando lo que pensamos y sentimos.
Oírnos para solo responder que ya tomaste una decisión, y que sos el obispo, no es escuchar, y mucho menos dialogar.
Te pedimos por favor la alternativa que se reserva a los grandes, de revisar y cambiar una decisión, preferiste generar dolor y división, ignorándonos, e ignorando que este lugar es referente para miles de personas que encontraron en nuestro estilo pastoral un modo de construir su fe.
Por eso te decimos hoy que no nos vamos de nuestra Cripta, porque es nuestra, pero no podemos compartir la eucaristía contigo y con Pedro.
Raúl, Coordinador Grupo de Desarrollo Comunitario. Integrante del Consejo Pastoral
25 años esta fue nuestra casa, nuestro espacio, donde intentamos con honestidad vivir el Evangelio sin glosas, como pedía Francisco de Asís.
Hoy ustedes vienen a quitarnos la parroquia. Se quedarán con el edificio, pero jamás podrán quedarse con La Cripta porque La Cripta es más que este edificio.
La Cripta es una forma de entender y de vivir el cristianismo como movimiento de libertad.
Ustedes se quedarán con las instalaciones, pero jamás podrán arrebatarnos la frescura, la rebeldía, la novedad y la Buena Noticia que aquí vivimos y compartimos.
La Cripta nunca será de ustedes, aunque habiten el espacio, porque aquí sí vale el diálogo, la diversidad, el respeto por las diferencias y la voz de los laicos.
Más de 500 personas lo gritaron y lo cantaron en ese abrazo conmovedor y hoy se los volvemos a decir: La identidad de La Cripta no se negocia!!.
Primero fue el conflicto con el cura Guillermo “Quito” Mariani, a quien el arzobispo Carlos Ñáñez retó en público por la edición de su libro Sin tapujos, en el que cuenta sus experiencias más mundanas como hombre y sacerdote. Luego el escándalo fue mayor cuando a fines del año pasado Ñáñez echó de la Iglesia al cura Nicolás Alessio, por haber apoyado públicamente la ley de matrimonio igualitario. Ahora, ya no son curas aislados los que se enfrentan a la jerarquía eclesiástica cordobesa, sino la propia feligresía. El domingo 10 de abril la comunidad de la parroquia Nuestra Señora del Valle, más conocida como La Cripta, en el Cerro de Las Rosas, organizó un abrazo solidario y simbólico, con un festival de música y teatro, para protestar contra la decisión del arzobispo de cambiar el párroco.
La Cripta tiene una línea pastoral de 40 años ligada con el Concilio Vaticano II e, incluso se podría decir, a la Teología de la Liberación. Suena paradójico, pero en uno de los barrios más aristocráticos de Córdoba, la parroquia encarna lo más progresista de la Iglesia Católica. Esta línea pastoral estuvo históricamente encarnada por el “Quito” Mariani y en los últimos años por el cura Víctor Acha, un sacerdote valiente que fue perseguido en la última dictadura militar. Y también por las hermanas de San Casimiro.
Además, en la Cripta se juntan periódicamente el grupo de base Obispo Enrique Angelleli y un grupo de más de 60 ex curas casados.
Pero este año, inconsultamente como suelen tomarse todas las decisiones en la Iglesia, el arzobispo Ñáñez designó al padre Pedro Torres para que reemplace como párroco a Víctor Acha, que ya tiene edad de jubilarse. El año pasado, Víctor Acha y Ñáñez habían acordado que el párroco se iría en julio de este año pero que acordarían su reemplazo para no romper la línea pastoral. Sin embargo, el arzobispo no cumplió con su palabra y en diciembre pasado mandó un mail informando que en marzo asumiría el nuevo párroco. El elegido a dedo era Pedro Torres, definido por los fieles como “un soldado fiel del sistema”.
“Todos pensamos que se trata de una elegante intervención a la historia de la Cripta, entre otras cosas para sacar al grupo de curas casados y al grupo Angelleli”, confió a Veintitrés uno de los miembros del grupo de curas casados, Adrián Vitali.
Los laicos fueron a hablar con Ñañez, pero siempre fue intransigente con su decisión. Luego fueron a ver a Pedro Torres para pedirle que no asumiera pero respondió que su nombramiento lo hacia el obispo y el por obediencia tenia que cumplir.
Agotado el diálogo, decidieron hacer público el conflicto y organizar un abrazo a la Cripta el domingo 10, bajo el lema: “Porque somos Iglesia, porque queremos ser escuchados, y porque queremos seguir viviendo y creciendo como laicos comprometidos en una Iglesia pluralista”.
Duró toda la tarde del domingo y ante un nutrido grupo de gente actuaron artistas de la talla de Silvia Lallana, Lula Fernández, Gustavo Chazarreta, Inti Huayra, Gustavo Patiño, Negro Vilchez, Norma Piccone y otros.
Pero no todo fue fiesta, también se consensuó y se dio a conocer un documento de la Asamblea parroquial en el que se expresa: “Decidimos rechazar la imposición del obispo porque nos ha costado un largo proceso personal y comunitario acrisolar un sentido de la vida y un sentido de nuestra fe; porque eso ni lo renunciamos, ni lo negociamos, ni lo cambiamos, porque sería renunciar a lo que somos, pensamos y sentimos; porque no queremos renunciar a nuestro espacio en la Iglesia de la que somos parte, en la que hemos crecido o descubierto este modo de vivir la fe; no queremos entregar este espacio porque nos pertenece y no queremos dejárselo a quienes intentan otra cosa”.
Una de las laicas de la comunidad, Laura Garzón, remarcó la intención de resistir: “Ante el desconcierto y perplejidad que nos causan estas actitudes rígidas, de imposiciones y sanciones, vamos a resistir, a no dejarnos desanimar o perder la esperanza.
Nos comprometemos a continuar trabajando, en un auténtico seguimiento de Jesús de Nazareth, en su proyecto, y en el desafío de llevar su Buena Noticia, con coraje y alegría, a las minorías de nuestra sociedad.
Seguiremos luchando, por una Iglesia pluralista y participativa; convencidos que el Espíritu Santo …no tiene sede exclusiva, ni preferida, en el Vaticano, o en Av. Hipólito Irigoyen (sede del Arzobispado de Córdoba). Ningún obispo, ningún sacerdote, ningún Papa, están por encima de nuestra libertad de conciencia, de expresión o de pensar.
Por último, queremos reafirmar, que reconocemos en el término Iglesia a la asamblea de todos los bautizados, que se gobierna a si misma”. Un claro desafío a la jerarquía siempre verticalista de la Iglesia Católica.
De hecho, esto es lo nuevo que está saltando a la luz en Córdoba, un conflicto inédito, el de los feligreses poniendo en cuestión la jerarquía de la Iglesia, el de una nueva Iglesia que plantea la necesidad de una cierta democracia asamblearia, mucho más cercana a las comunidades de los apóstoles y los primeros cristianos que a la historia dos veces milenaria de la institución que prosiguió.
En las misas de la Cripta, se seguirá leyendo un texto aclaratorio en el que se intenta responder a la pregunta “¿Qué está en juego con la llegada de un sacerdote que no comparte los lineamientos teológicos y pastorales que han orientado desde hace décadas el ser y hacer de La Cripta?”. Según la comunidad, “Está en juego que la Cripta continúe siendo una comunidad que funda su pensamiento y su acción en los postulados del Concilio Vaticano II y en la Teología más avanzada desarrollada a partir de entonces; está en juego esta parroquia donde se puede integrar todo el que busque sinceramente crecer como buena persona y como creyente fiel al Evangelio de Jesús; está en juego este espacio donde no hay exclusiones; donde no hay exigencias pastorales que alejan a quienes no se ajustan a modelos convencionales; donde no se imponen condiciones ni trabas para que las personas accedan a los sacramentos o se integren en tareas comunitarias; está en juego poder participar de una liturgia sin acartonamientos, ni apego a las rúbricas, de carácter festivo y donde se tiene como eje vertebral el anuncio del mensaje, partiendo no de los dogmas sino de las realidades humanas que vivimos todos los días las personas; está en juego el legítimo derecho que tiene esta y cualquier otra comunidad a opinar respecto al sacerdote que se hará cargo de conducir la animación de la comunidad; está en juego todo aquello por lo que todos ustedes participan de esta comunidad y no de otra”.
Córdoba es contradictoria, es la Córdoba de las campanas, pacata, aristocrática, lomo negro, clerical, con una iglesia en cada cuadra pero todas parecidas en cuanto al discurso y a la práctica. Pero también es la Córdoba obrera y estudiantil, la de la Reforma Universitaria de 1918, la del Cordobazo y el Vivorazo, la rebelde y combativa. Y la Iglesia de Córdoba no puede ser ajena a esas características de Córdoba. Por eso, dentro de la Iglesia de Córdoba está el Opus Dei con sus colegios y residencias en Villa Allende y en Nueva Córdoba, incluso están los lefebristas recientemente indultados por el papa Benedicto XVI que van a las exposiciones de arte a romper cuadros, pero también están los sacerdotes combativos, como el Quito Mariani, Víctor Acha, Ponce de León, Nicolás Alessio y tantos más. Pero también están las comunidades eclesiales de base y los grupos de laicos como el de la Cripta.
Ahora, este conflicto es algo nuevo, está planteando democratizar la Iglesia Católica, algo que pareciera imposible hoy por hoy. Pero Córdoba puede seguir sorprendiéndonos.
Fuente: Blog de Mariano Saravia
Hoy es el día en que celebramos la institución del amor como servicio, o, del servicio como amor.
Es el día en que la autoridad, la catequesis, el discipulado, se ejercen y se ennoblecen, desde los pies, desde abajo, desde la tierra, desde los menores diría San Francisco de Asís.
Es el día en que los que tienen alguna función de conducción, de orientación, de guía, de pastoreo; dentro de la Iglesia se replanteen, si están siendo fieles y consecuentes a la buena noticia de Jesús; o solo repiten gestos y rituales vacíos de contenido para el mundo de hoy, porque en su práctica diaria se asemejan más al sanedrín, que a los discípulos de Jesús.
Como laicos, como personas comunes, pero igualmente responsables en el seguimiento y actualización del proyecto de Jesús de Nazaret; cuestionamos y denunciamos a la jerarquía eclesial, que con su hipocresía y rigor medieval, solo confunde y aleja a las personas creyentes de hoy, del Dios Padre y Madre universal que nos revela Jesús.
Como comunidad, rechazamos la decisión del obispo de imponernos un párroco que no coincide con nuestras búsquedas de una fe recreada, renovada, con responsabilidad y libertad, a la luz de las nuevas propuestas teológicas pos-conciliares, a la luz de la ciencia y del arte, y especialmente a la luz de los crucificados de hoy.
Hemos decidido, no aceptar tal designación, ni la instalación del nuevo sacerdote en la sede parroquial, por ser inconsulta y opuesta a nuestra identidad cristiana.
Comunidad de la parroquia nuestra señora del valle
“La Cripta”
Me presento
Buenas tardes a todos y Gracias por acompañarnos hoy en este “ABRAZO A LA CRIPTA”.
Soy Darío Passadore, Presidente del Consejo Pastoral de La Cripta.
Estas expresiones artísticas que estamos compartiendo hoy son espectaculares, como es significativo que nos reunamos hoy a compartir todo esto. Pero me toca a mi proponerles un alto e invitarlos a darle significación a esta actividad.
Como todos Uds. saben la inconsulta decisión del Obispo Carlos Ñañez de designar un párroco disonante con nuestra línea pastoral nos pone aquí, en el jardín, a la intemperie.
Desde la intemperie es interesante recordar que hemos logrado una construcción como comunidad, y una identidad, impulsados por una búsqueda que nos es común. Pero es momento de preguntarnos, esta búsqueda, ¿desde dónde la hacemos?
Somos testimonio de lo que hemos cosechado aquí, en La Cripta, mas, ¿Cuál ha sido la nutriente de esta experiencia?
La respuesta a estos dos interrogantes es una, y es poderosa, la respuesta es UNA LECTURA DE JESUS Y DE SU EVANGELIO.
LA REALIDAD ES ENTONCES QUE TENEMOS UNA LECTURA DEL EVANGELIO DE JESUS DE NAZARET, Y DESDE ALLI ES DESDE DONDE HACEMOS, Y HA SIDO LA NUTRIENTE DE ESTA EXPERIENCIA QUE QUEREMOS ABRAZAR Y QUE RECONOCEMOS COMO LA CRIPTA.
DESDE LA INTEMPERIE, Y DESDE ESTA LECTURA, TAL COMO VOTAMOS LIBRE Y UNANIMEMENTE EN OCASION DE NUESTRA ASAMBLEA PARROQUIAL, DECIDIMOS RECHAZAR LA IMPOSICION DEL OBISPO
DECIDIMOS RECHAZAR LA IMPOSICION DEL OBISPO
Doy paso ahora al grupo de teatro de la cripta, ExTras, que nos guiará en este emotivo abrazo simbólico a nuestra Cripta.
La convocatoria superó las expectativas. La consigna fue clara y la gritamos entre todos: ¡“la identidad de la Cripta NO se negocia”!
ABRAZO A LA CRIPTA Por Laura Garzón.
Desde la afirmación: ¡“la identidad de la Cripta NO se negocia”! Aún resonando en nuestros oídos y corazones, es que afirmamos:
Que ante el desconcierto y perplejidad que nos causan estas actitudes rígidas, de imposiciones y sanciones, vamos a resistir, a no dejarnos desanimar o perder la esperanza.
Nos comprometemos a continuar trabajando, en un auténtico seguimiento de Jesús de Nazareth, en su proyecto, y en el desafío de llevar su Buena Noticia, con coraje y alegría, a las minorías de nuestra sociedad.
Seguiremos luchando, por una Iglesia pluralista y participativa; convencidos que el Espíritu Santo guía e ilumina, a todas las personas de Buena Voluntad. No tiene sede exclusiva, ni preferida, en el Vaticano, o en Av. Hipólito Irigoyen. Ningún obispo, ningún sacerdote, ningún Papa, están por encima de nuestra Libertad de conciencia, de expresión o de pensar.
Por último, queremos reafirmar, que reconocemos en el término Iglesia a la Asamblea de todos los bautizados, que se gobierna a si misma. Todos reconocemos a un mismo Padre, y en Jesús, a todos los hombres como nuestros hermanos.
Queremos agradecer especialmente a Quito, Víctor y las Hermanas de San Casimiro; pilares fundamentales en la construcción de esta Utopía, que durante 40 años, más allá de ser el sueño de una porción de Iglesia, ha sido un aporte y una lucha por la Dignidad Humana.
No sé si somos muchos o pocos, algunos dicen que somos un pequeño grupo de rebeldes (o algo así) pero no importa la cantidad, sino la convicción y el compromiso auténtico con la causa de Jesús.