Desafío al arzobispo Carlos Ñáñez. Por Mariano Saravia – Revista 23

Primero fue el conflicto con el cura Guillermo “Quito” Mariani, a quien el arzobispo Carlos Ñáñez retó en público por la edición de su libro Sin tapujos, en el que cuenta sus experiencias más mundanas como hombre y sacerdote. Luego el escándalo fue mayor cuando a fines del año pasado Ñáñez echó de la Iglesia al cura Nicolás Alessio, por haber apoyado públicamente la ley de matrimonio igualitario. Ahora, ya no son curas aislados los que se enfrentan a la jerarquía eclesiástica cordobesa, sino la propia feligresía. El domingo 10 de abril la comunidad de la parroquia Nuestra Señora del Valle, más conocida como La Cripta, en el Cerro de Las Rosas, organizó un abrazo solidario y simbólico, con un festival de música y teatro, para protestar contra la decisión del arzobispo de cambiar el párroco.

La Identidad de La Cripta NO se negocia

La Cripta tiene una línea pastoral de 40 años ligada con el Concilio Vaticano II e, incluso se podría decir, a la Teología de la Liberación. Suena paradójico, pero en uno de los barrios más aristocráticos de Córdoba, la parroquia encarna lo más progresista de la Iglesia Católica. Esta línea pastoral estuvo históricamente encarnada por el “Quito” Mariani y en los últimos años por el cura Víctor Acha, un sacerdote valiente que fue perseguido en la última dictadura militar. Y también por las hermanas de San Casimiro.

Además, en la Cripta se juntan periódicamente el grupo de base Obispo Enrique Angelleli y un grupo de más de 60 ex curas casados.

Pero este año, inconsultamente como suelen tomarse todas las decisiones en la Iglesia, el arzobispo Ñáñez designó al padre Pedro Torres para que reemplace como párroco a Víctor Acha, que ya tiene edad de jubilarse. El año pasado, Víctor Acha y Ñáñez habían acordado que el párroco se iría en julio de este año pero que acordarían su reemplazo para no romper la línea pastoral. Sin embargo, el arzobispo no cumplió con su palabra y en diciembre pasado mandó un mail informando que en marzo asumiría el nuevo párroco. El elegido a dedo era Pedro Torres, definido por los fieles como “un soldado fiel del sistema”.

“Todos pensamos que se trata de una elegante intervención a la historia de la Cripta, entre otras cosas para sacar al grupo de curas casados y al grupo Angelleli”, confió a Veintitrés uno de los miembros del grupo de curas casados, Adrián Vitali.

Los laicos fueron a hablar con Ñañez, pero siempre fue intransigente con su decisión. Luego fueron a ver a Pedro Torres para pedirle que no asumiera pero respondió que su nombramiento lo hacia el obispo y el por obediencia tenia que cumplir.

Agotado el diálogo, decidieron hacer público el conflicto y organizar un abrazo a la Cripta el domingo 10, bajo el lema: “Porque somos Iglesia, porque queremos ser escuchados, y porque queremos seguir viviendo y creciendo como laicos comprometidos en una Iglesia pluralista”.

Duró toda la tarde del domingo y ante un nutrido grupo de gente actuaron artistas de la talla de Silvia Lallana, Lula Fernández, Gustavo Chazarreta, Inti Huayra, Gustavo Patiño, Negro Vilchez, Norma Piccone y otros.

Pero no todo fue fiesta, también se consensuó y se dio a conocer un documento de la Asamblea parroquial en el que se expresa: “Decidimos rechazar la imposición del obispo porque nos ha costado un largo proceso personal y comunitario acrisolar un sentido de la vida y un sentido de nuestra fe; porque eso ni lo renunciamos, ni lo negociamos, ni lo cambiamos, porque sería renunciar a lo que somos, pensamos y sentimos; porque no queremos renunciar  a nuestro espacio en la Iglesia de la que somos parte, en la que hemos crecido o descubierto este modo de vivir la fe; no queremos entregar este espacio porque nos pertenece y no queremos dejárselo a quienes intentan otra cosa”.

Una de las laicas de la comunidad, Laura Garzón, remarcó la intención de resistir: “Ante el desconcierto y perplejidad que nos causan estas actitudes rígidas, de imposiciones y sanciones, vamos a resistir, a no dejarnos desanimar o perder la esperanza.
Nos comprometemos a continuar trabajando, en un auténtico seguimiento de Jesús de Nazareth, en su proyecto, y en el desafío de llevar su Buena Noticia, con coraje y alegría, a las minorías de nuestra sociedad.
Seguiremos luchando, por una Iglesia pluralista y participativa; convencidos que el Espíritu Santo …no tiene sede exclusiva, ni preferida, en el Vaticano, o en Av. Hipólito Irigoyen (sede del Arzobispado de Córdoba). Ningún obispo, ningún sacerdote, ningún Papa, están por encima de nuestra libertad de conciencia, de expresión o de pensar.
Por último, queremos reafirmar, que  reconocemos en el término Iglesia a la asamblea de todos los bautizados, que se gobierna a si misma”. Un claro desafío a la jerarquía siempre verticalista de la Iglesia Católica.

De hecho, esto es lo nuevo que está saltando a la luz en Córdoba, un conflicto inédito, el de los feligreses poniendo en cuestión la jerarquía de la Iglesia, el de una nueva Iglesia que plantea la necesidad de una cierta democracia asamblearia, mucho más cercana a las comunidades de los apóstoles y los primeros cristianos que a la historia dos veces milenaria de la institución que prosiguió.

En las misas de la Cripta, se seguirá leyendo un texto aclaratorio en el que se intenta responder a la pregunta “¿Qué está en juego con la llegada de un sacerdote que no comparte los lineamientos teológicos y pastorales que han orientado desde hace décadas el ser y hacer de La Cripta?”. Según la comunidad, “Está en juego que la Cripta continúe siendo una comunidad que funda su pensamiento y su acción en los postulados del Concilio Vaticano II y en la Teología más avanzada desarrollada a partir de entonces; está en juego esta parroquia donde se puede integrar todo el que busque sinceramente crecer como buena persona y como creyente fiel al Evangelio de Jesús; está en juego este espacio donde no hay exclusiones; donde no hay exigencias pastorales que alejan a quienes no se ajustan a modelos convencionales; donde no se imponen condiciones ni trabas para que las personas accedan a los sacramentos o se integren en tareas comunitarias; está en juego poder participar de una liturgia sin acartonamientos, ni apego a las rúbricas, de carácter festivo y donde se tiene como eje vertebral el anuncio del mensaje, partiendo no de los dogmas sino de las realidades humanas que vivimos todos los días las personas; está en juego el legítimo derecho que tiene esta y cualquier otra comunidad a opinar respecto al sacerdote que se hará cargo de conducir la animación de la comunidad; está en juego todo aquello por lo que todos ustedes participan de esta comunidad y no de otra”.

Córdoba es contradictoria, es la Córdoba de las campanas, pacata, aristocrática, lomo negro, clerical, con una iglesia en cada cuadra pero todas parecidas en cuanto al discurso y a la práctica. Pero también es la Córdoba obrera y estudiantil, la de la Reforma Universitaria de 1918, la del Cordobazo y el Vivorazo, la rebelde y combativa. Y la Iglesia de Córdoba no puede ser ajena a esas características de Córdoba. Por eso, dentro de la Iglesia de Córdoba está el Opus Dei con sus colegios y residencias en Villa Allende y en Nueva Córdoba, incluso están los lefebristas recientemente indultados por el papa Benedicto XVI que van a las exposiciones de arte a romper cuadros, pero también están los sacerdotes combativos, como el Quito Mariani, Víctor Acha, Ponce de León, Nicolás Alessio y tantos más. Pero también están las comunidades eclesiales de base y los grupos de laicos como el de la Cripta.

Ahora, este conflicto es algo nuevo, está planteando democratizar la Iglesia Católica, algo que pareciera imposible hoy por hoy. Pero Córdoba puede seguir sorprendiéndonos.

 

Fuente: Blog de Mariano Saravia

 

Jueves Santo. Por Laura Garzón

Hoy es el día en que celebramos la institución del amor como servicio, o, del servicio como amor.

Es el día en que la autoridad, la catequesis, el discipulado, se ejercen y se ennoblecen, desde los pies, desde abajo, desde la tierra, desde los menores diría San Francisco de Asís.

Es el día en que los que tienen alguna función de conducción, de orientación, de guía, de pastoreo; dentro de la Iglesia se replanteen, si están siendo fieles y consecuentes a la buena noticia de Jesús; o solo repiten gestos y rituales vacíos de contenido para el mundo de hoy, porque en su práctica diaria se asemejan más al sanedrín, que a los discípulos de Jesús.

Como laicos, como personas comunes, pero igualmente responsables en el seguimiento y actualización del proyecto de Jesús de Nazaret; cuestionamos y denunciamos a la jerarquía eclesial, que con su hipocresía y rigor medieval, solo confunde y aleja a las personas creyentes de hoy, del Dios Padre y Madre universal que nos revela Jesús.

Como comunidad, rechazamos la decisión del obispo de imponernos un párroco que no coincide con nuestras búsquedas de una fe recreada, renovada, con responsabilidad y libertad, a la luz de las nuevas propuestas teológicas pos-conciliares, a la luz de la ciencia y del arte, y especialmente a la luz de los crucificados de hoy.

Hemos decidido, no aceptar tal designación, ni la instalación del nuevo sacerdote en la sede parroquial, por ser inconsulta y opuesta a nuestra identidad cristiana.

Comunidad de la parroquia nuestra señora del valle

“La Cripta”

Desde el Jardín. Por Darío Passadore

Me presento
Buenas tardes a todos y Gracias por acompañarnos hoy en este “ABRAZO A LA CRIPTA”.
Soy Darío Passadore, Presidente del Consejo Pastoral de La Cripta.

Estas expresiones artísticas que estamos compartiendo hoy son espectaculares, como es significativo que nos reunamos hoy a compartir todo esto. Pero me toca a mi proponerles un alto e invitarlos a darle significación a esta actividad.

La Identidad de La Cripta NO se negocia. Grupo de Teatro ExTras

Como todos Uds. saben la inconsulta decisión del Obispo Carlos Ñañez de designar un párroco disonante con nuestra línea pastoral nos pone aquí, en el jardín, a la intemperie.

Desde la intemperie es interesante recordar que hemos logrado una construcción como comunidad, y una identidad, impulsados por una búsqueda que nos es común. Pero es momento de preguntarnos, esta búsqueda, ¿desde dónde la hacemos?

Somos testimonio de lo que hemos cosechado aquí, en La Cripta, mas, ¿Cuál ha sido la nutriente de esta experiencia?
La respuesta a estos dos interrogantes es una, y es poderosa, la respuesta es UNA LECTURA DE JESUS Y DE SU EVANGELIO.

LA REALIDAD ES ENTONCES QUE TENEMOS UNA LECTURA DEL EVANGELIO DE JESUS DE NAZARET, Y DESDE ALLI ES DESDE DONDE HACEMOS, Y HA SIDO LA NUTRIENTE DE ESTA EXPERIENCIA QUE QUEREMOS ABRAZAR Y QUE RECONOCEMOS COMO LA CRIPTA.

DESDE LA INTEMPERIE, Y DESDE ESTA LECTURA, TAL COMO VOTAMOS LIBRE Y UNANIMEMENTE EN OCASION DE NUESTRA ASAMBLEA PARROQUIAL,  DECIDIMOS RECHAZAR LA IMPOSICION DEL OBISPO

 

DECIDIMOS RECHAZAR LA IMPOSICION DEL OBISPO

  • Porque nos ha costado un largo proceso personal y comunitario acrisolar un sentido de la vida y un sentido de nuestra fe.

  • Porque eso ni lo renunciamos, ni lo negociamos, ni lo cambiamos, porque sería renunciar a lo que somos, pensamos y sentimos.

  • Porque no queremos renunciar  a nuestro espacio en la Iglesia de la que somos parte, en la que hemos crecido o descubierto este modo de vivir la fe; no queremos entregar este espacio porque nos pertenece y no queremos dejárselo a quienes intentan otra cosa.

 

Doy paso ahora al grupo de teatro de la cripta, ExTras, que nos guiará en este emotivo abrazo simbólico a nuestra Cripta.

 

 

 

¡“la identidad de la Cripta NO se negocia”! Abrazo Multitudinario. Por Laura Garzón

La convocatoria superó las expectativas. La consigna fue clara y la gritamos entre todos: ¡“la identidad de la Cripta NO se negocia”!

ABRAZO A LA CRIPTA  Por Laura Garzón.

Desde la afirmación: ¡“la identidad de la Cripta NO se negocia”!  Aún resonando en nuestros oídos y corazones, es que afirmamos:

Que ante el desconcierto y perplejidad que nos causan estas actitudes rígidas, de imposiciones y sanciones, vamos a resistir, a no dejarnos desanimar o perder la esperanza.
Nos comprometemos a continuar trabajando, en un auténtico seguimiento de Jesús de Nazareth, en su proyecto, y en el desafío de llevar su Buena Noticia, con coraje y alegría, a las minorías de nuestra sociedad.
Seguiremos luchando, por una Iglesia pluralista y participativa; convencidos que el Espíritu Santo guía e ilumina, a todas las personas de Buena Voluntad. No tiene sede exclusiva, ni preferida, en el Vaticano, o en Av. Hipólito Irigoyen. Ningún obispo, ningún sacerdote, ningún Papa, están por encima de nuestra Libertad de conciencia, de expresión o de pensar.
Por último, queremos reafirmar, que  reconocemos en el término Iglesia a la Asamblea de todos los bautizados, que se gobierna a si misma. Todos reconocemos a un mismo Padre, y en Jesús, a todos los hombres como nuestros hermanos.

Queremos agradecer especialmente a Quito, Víctor y las Hermanas de San Casimiro; pilares fundamentales en la construcción de esta Utopía, que durante 40 años, más allá de ser el sueño de una porción de Iglesia, ha sido un aporte y una lucha por la Dignidad Humana.

No sé si somos muchos o pocos, algunos dicen que somos un pequeño grupo de rebeldes (o algo así) pero no importa la cantidad, sino la convicción y el compromiso auténtico con la causa de Jesús.

¡“la identidad de la Cripta NO se negocia”!

Basta de Chicos Policías. Por Norberto Alayón

En noviembre de 2010 escribí una nota sobre “Los niños y niñas policías”, la cual fue publicada en distintos boletines y páginas digitales del país. En la misma hacía referencia a la irradiación de variadas experiencias de “Policía infantil” y “Gendarmería infantil” en las provincias de Chubut, Salta y Misiones.

Llamaba la atención acerca de la proliferación de estos programas de involucramiento policial de los niños y niñas, existentes en más de una decena de las provincias argentinas, lo cual implicaba una suerte de militarización de nuestra infancia.

Indudablemente, desde estas supuestas cándidas e inofensivas propuestas se tiende a fortalecer y reproducir en la sociedad -desde la propia infancia- un estilo de comportamiento cultural que privilegia una férrea disciplina militarizada, basada en el orden, las órdenes y la rigurosa obediencia.

Para ello se cuenta con la aceptación activa de algunos pocos y también con la aceptación pasiva de la mayoría de la población, que por diversas razones no llega a advertir los riesgos que estas prácticas contienen y dejan de levantar una voz siquiera de alerta y rechazo ante este avance, crecientemente extendido, que pretende imponer una concepción militarista de la vida y la familiarización con las armas, aunque no las porten ellos, desde la más temprana edad.

La excusa para impulsar e irradiar estas experiencias policiales procura centrarse en el eventual servicio que prestarían para la “contención de los niños marginalizados”. Resulta imperioso enfatizar que el lugar de los niños -pobres o no- está en la casa y en la escuela (que en virtud de la Ley 1420 del siglo XIX establece la educación obligatoria, laica y gratuita), y no en las brigadas, escuadras o cuerpos policiales, bajo la estricta lógica de los entrenamientos y adoctrinamientos militares.

Como en tantas otras ocasiones, surge, con nitidez, la clásica y perversa asociación de pobreza con delincuencia. El estigma, la duda, el miedo, siempre recaen sobre los pobres y los humildes. Y, entonces, a los niños pobres habrá que encauzarlos, reeducarlos, readaptarlos, disciplinarlos, inculcarles “valores netamente argentinos”, porque sino serán el peligro del mañana.

El reconocido especialista brasileño Edson Seda me comentaba, en correspondencia personal del 24 de noviembre de 2010, que “en Brasil hemos tenido cosas parecidas, como niños ‘patrulheiros’ o ‘guardinhas’ y otras denominaciones, organizadas por jueces y ciertas ONGs del pasado. No lo tenemos más, porque todos los programas de protección de la infancia tienen que ser aprobados por un Consejo paritario (entre el mundo gubernamental y el no gubernamental) en cada municipio. Este tipo de programas, en Brasil, son considerados hoy discriminatorios, y los Consejos no los aprueban”.

Es evidente que se torna necesario introducir cambios progresivos en la línea de la defensa de los derechos de la infancia y la adolescencia y, al día de hoy, reparamos en una muy buena y significativa noticia:siguiendo instrucciones del Ministerio de Seguridad de la Nación la policía de Misiones desarticulará 32 entidades de policía infantil que funcionan en esa provincia. La decisión ministerial se fundamentó en requerimientos de organismos de derechos humanos que señalaron que “los niños y los menores de edad no deben educarse dentro de ambientes de las instituciones de seguridad, nacionales o provinciales”.

Es de desear que este impulso de recuperación de la sensatez, en favor de la infancia y, a la vez,  de la sociedad en su conjunto, se extienda también a otras provincias como Catamarca, La Rioja, Jujuy, Mendoza, San Juan, Neuquén, Santa Fe, Entre Ríos, Chaco, Corrientes, donde persisten -lamentablemente desde hace muchos años- experiencias de militarización de niños, niñas y adolescentes.

 

Buenos Aires, 7 de abril de 2011

Norberto Alayón es Trabajador Social. Profesor Titular de la Facultad de Ciencias Sociales-UBA


 

ABRAZO A “LA CRIPTA”. En defensa de nuestro modo de ser.

PORQUE SOMOS IGLESIA, PORQUE QUEREMOS SER ESCUCHADOS, Y PORQUE QUEREMOS SEGUIR VIVIENDO Y CRECIENDO COMO LAICOS COMPROMETIDOS EN UNA IGLESIA PLURALISTA, LOS INVITAMOS A COMPARTIR NUESTRAS ALEGRÍAS E INQUIETUDES, Y PARTICIPAR EN LA GRAN MOVIDA ARTISTICO-CULTURAL DE ABRAZO A “LA CRIPTA”,

EL DOMINGO 10 DE ABRIL,   DE   14,30 a 18,30 HS. EN LOS JARDINES DE LA PARROQUIA NUESTRA SRA. DEL VALLE “LA CRIPTA”.

ACTUARAN: SILVIA LALLANA, LULA FERNANDEZ, GUSTAVO CHAZARRETA, INTI HUYRA, GUSTAVO PATIÑO, “NEGRO VILCHEZ”, NORMA PICCONE, GRUPO MIXTURA, EMBAJADA CULTURAL DE RIO III, ENTRE OTROS,  Y EL CORAL DE LA CRIPTA Y EL TALLER DE TEATRO “EX TRAS”.

AVDA LA PLACE  5788, A METROS DE “LA MUJER URBANA” COLECTIVOS  Linea N

NO FALTEN!!!

“Abrazo de resistencia” a La Cripta. Por Alexis Oliva

La comunidad de La Cripta realizará este domingo un abrazo a la sede parroquial de Villa Belgrano en protesta por la designación de un párroco adverso a la línea de trabajo social, democrático y pluralista que vienen desarrollando desde hace más de 40 años. Lo decidió Ñáñez.

La comunidad de la parroquia Nuestra Señora del Valle -conocida como La Cripta- protestará este domingo contra la decisión unilateral del arzobispo Carlos Ñáñez de designar al cura párroco Pedro Torres, a quien atribuyen una actitud de “obediencia debida” con la jerarquía que históricamente los ha marginado y desalentado en su trabajo social.

La modalidad de la protesta será una “gran movida artístico-cultural de abrazo a La Cripta”, desde las 14,30 horas del próximo domingo 10 de abril, en la que actuarán el coro y el grupo de teatro de la parroquia y conjuntos folclóricos invitados. Previamente, esta noche desde las 22,30 se realizará una peña de despedida al párroco saliente, Víctor Acha, y “preparación de la resistencia”.

Más allá de que el nombramiento de un sacerdote es potestad del Arzobispado, lo habitual es que el designado tenga el apoyo del colectivo que va a conducir. En este caso, las diferencias teológicas e ideológicas con los curas que han conducido esta parroquia -identificados con la línea tercermundista-, hacen que la comunidad interprete esta decisión como “un nuevo gesto de intolerancia hacia la Iglesia de los pobres”.

En este sentido, el conflicto va más allá de una cuestión personal de simpatía o antipatía con los sacerdotes y se enmarca en el avance del conservadurismo de la Iglesia oficial sobre las cada vez más escasas experiencias de las comunidades de base con una impronta de transformación social.

“Para algunos ésta es una parroquia combativa. Y no están de acuerdo porque crea problemas y discute ciertas decisiones de la Iglesia oficial. Esta parroquia está comprometida con la realidad, con los pobres, con las personas diferentes; no está con el estatus de la Iglesia jerárquica. Nosotros frente a un conflicto de la realidad, no nos guiamos por lo que dice la Iglesia jerárquica, sino que vamos a lo que Jesucristo dice. Por eso se quiere terminar con experiencias de base como la nuestra”. Así lo explica a Prensared Beatriz Brikworth, integrante del consejo pastoral de La Cripta y militante de esa comunidad desde hace más de 40 años.

Fue en esa época cuando el Concilio Vaticano II impulsaba un proceso de renovación, apertura y compromiso, que llevaría a La Cripta a un sacerdote plenamente identificado con ese proceso: Guillermo “Quito” Mariani. Fueron 39 años en los que condujo esta comunidad, durante el período de nacimiento, apogeo y declinación del Movimiento de Sacerdotes para el Tercer Mundo, que se desarrolló en paralelo con el proceso de politización de los sectores obreros y juveniles, truncado luego por la represión dictatorial.

Luego de la jubilación de Mariani, en 2006, se logró la designación de un cura de la misma línea posconciliar, Víctor Acha, respetado por su trabajo en la parroquia de barrio Villa El Libertador durante los años 60 y 70, cuando llegó a sufrir once allanamientos antes de su obligado exilio. Acha continuó con la tarea desarrollada por su predecesor, estimulando el protagonismo de los laicos en la planificación y desarrollo de la tarea pastoral que involucra a unos 500 vecinos de Villa Belgrano y otros barrios de Córdoba que participan en las actividades de La Cripta. Ante su inminente jubilación, fue designado Torres, a quien consideran “la antítesis de lo que somos como comunidad”.

Ex seminarista e integrante del consejo pastoral, Daniel García Carranza, plantea lo que está en riesgo: “Lo que estamos tratando de hacer es mantener vivas las ideas del Concilio Vaticano II, que desde que surgieron se empezaron a implementar acá y la gente empezó a vivir esas cosas. Nosotros no estamos en nada raro. Lo que pasa que la Iglesia, con Juan Pablo II y ahora con Benedicto XVI está cerrando los libros del Vaticano Segundo, diciendo que esto no está vigente. No es la doctrina social de la Edad Media lo que tenemos que seguir, sino la del siglo XXI, porque la sociedad ha cambiado. Por eso la prioridad nuestra es la libertad de conciencia entre la gente”.

“Otro aspecto que genera una reacción adversa en la jerarquía es que nos permitimos debatir cosas que la jerarquía de la Iglesia no quiere discutir -apunta el laico Darío Passadore-. Por ejemplo, la ley del matrimonio igualitario. Por supuesto que hubo dentro de la comunidad distintas posiciones, pero la debatimos y tuvimos un montón de reuniones reflexionando e intercambiando información. No es que porque la Iglesia toma una postura nosotros agachamos la cabeza, sino que buscamos, a la luz del Evangelio, informándonos y pensando, buscar una postura propia con consenso”.

Justamente, con ese reciente debate está relacionado un antecedente poco alentador respecto a un eventual cambio de decisión del arzobispo Ñáñez: la “suspensión” (léase cesantía) al cura Nicolás Alessio por haber “cometido rechazo pertinaz de la doctrina descrita, al sacramento del matrimonio y desobediencia al Ordinario”, al manifestar públicamente su apoyo a la unión civil entre personas del mismo sexo.

No obstante, el colectivo La Cripta no está dispuesto a transigir y prefiere no tener un párroco propio y mantenerse transitoriamente como una vicaría, hasta que su reclamo sea escuchado.

En un comunicado a la opinión pública, se explicitan los motivos: “Decidimos rechazar la imposición del obispo. Porque nos ha costado un largo proceso personal y comunitario acrisolar un sentido de la vida y un sentido de nuestra fe. Porque eso ni lo renunciamos, ni lo negociamos, ni lo cambiamos, porque sería renunciar a lo que somos, pensamos y sentimos. Porque no queremos renunciar  a nuestro espacio en la Iglesia de la que somos parte, en la que hemos crecido o descubierto este modo de vivir la fe; no queremos entregar este espacio porque nos pertenece y no queremos dejárselo a quienes intentan otra cosa. (Porque queremos) dar a conocer que hay otro rostro de Iglesia que aquel que muestran los que tienen el poder (y que parece han olvidado que desde Jesús el poder es servicio)”.

 

Fuente Nota: www.prensared.com.ar

Fuente Foto: José Luis Cortés

Charlas en la Cripta. DDHH y Conflictos de Hoy. Derecho a la Identidad. Viernes 15 de Abril 20.30 hs.

Viernes 15 de Abril 20.30 hs.

 

Charlas en La Cripta

DERECHOS HUMANOS Y CONFLICTOS DE HOY

DERECHO A LA IDENTIDAD

Con la participación de:

Sonia Torres,

Titular de la filial Córdoba de Abuelas de Plaza de Mayo

Luis Miguel Baronetto,

Ex-director de Derechos Humanos de la Municipalidad de Córdoba, querellante de la causa UP1, Director  de la Revista Tiempo Latinoamericano, autor de varios libros entre ellos, “Derechos Humanos: una Tarea, una Construcción”

 

Y  los aportes  del Párroco Víctor S. Acha

 

Laplace 5786 (a mts Mujer Urbana) – Colectivos línea N

Para comunicación e informaciones charlasenlacripta@gmail.com

 

 

COMUNICADO DE PRENSA – PARROQUIA LA CRIPTA

Ante la imposición por parte del Obispo de un nuevo párroco que no comparte la manera de ser y hacer de la Comunidad de La Cripta, se convocó a una Asamblea Comunitaria el pasado sábado 26 de febrero. En la misma se votó el rechazo a ésta y cualquier designación que no respete el perfil de párroco propuesto oportunamente.

Esta decisión tiene como base el hecho de que ninguno de los pasos previos que intentaron la vía del diálogo, primero del párroco con el Obispo, luego de representantes de la comunidad con el Obispo y finalmente de representantes de la comunidad con el párroco designado tuvieron como resultado una escucha abierta y respetuosa de nuestras opciones.

Nuestro rechazo no es específicamente a esta designación o a la persona impuesta sino al modo autoritario que no toma en consideración la elección que, como cristianas y cristianos adultos y comprometidos, hacemos de nuestra práctica y nuestro modo de ser en la Iglesia.

La Asamblea analizó la historia y las opciones de la Parroquia, reflexionó sobre el lugar del laico en la Iglesia y su derecho a pedir como reemplazante del párroco que se jubila, una persona acorde a las necesidades y opciones de la comunidad.

Finalmente se sometió a votación la alternativa de aceptar o rechazar el nombramiento impuesto por el obispo.
DECIDIMOS RECHAZAR LA IMPOSICION DEL OBISPO

  • Porque nos ha costado un largo proceso personal y comunitario acrisolar un sentido de la vida y un sentido de nuestra fe.
  • Porque eso ni lo renunciamos, ni lo negociamos, ni lo cambiamos, porque sería renunciar a lo que somos, pensamos y sentimos.
  • Porque no queremos renunciar  a nuestro espacio en la Iglesia de la que somos parte, en la que hemos crecido o descubierto este modo de vivir la fe; no queremos entregar este espacio porque nos pertenece y no queremos dejárselo a quienes intentan otra cosa.

Sometida a votación la opción por “ACEPTAR” o “RECHAZAR” el nombramiento del nuevo párroco, el resultado fue que casi por mayoría absoluta se decidió rechazar y resistir el nombramiento de este y cualquier otro párroco que no esté alineado con nuestras convicciones.

 

Por eso resistiremos:

  • Para afianzar nuestro camino y nuestra comprensión de la vida y la fe.
  • Para que en la experiencia comunitaria se fortalezcan esas convicciones.
  • Para decir a quien quiera oírlo, que entendemos de este modo y no de otro la fe y la vida cristiana.
  • Para dar a conocer que hay otro rostro de Iglesia que aquel que muestran los que tienen el poder (y que parece han olvidado que desde Jesús el poder es servicio)

Una comisión propondrá y ejecutará diversas acciones y quedó convocada una próxima Asamblea para  definir nuevos pasos.

La Cripta, 2 de Marzo de 2011

 

La misa del asesino. Por Laura Vales

“Alerta vecino” decían los volantes que, el domingo pasado, militantes de la JP Evita repartieron en la iglesia María Inmaculada de la diócesis de San Martín cuando el cura Alberto Angel Zanchetta, desde el altar, se disponía a terminar la misa dando su bendición a los presentes. No pudo hacerlo. Ante el escrache de los chicos, aguantó lo que pudo y finalmente hizo mutis por el foro. Ex capitán de fragata, Zanchetta fue durante la dictadura uno de los capellanes de la Escuela de Mecánica de la Armada, donde se ocupaba de contener espiritualmente a los marinos que volvían de tirar secuestrados al mar.

Zanchetta había desembarcado a principios de marzo en esa parroquia del conurbano, donde lo mandaron con bajo perfil, para ocuparse sólo de hacer tareas administrativas. Cobijado por el obispo de San Martín y Tres de Febrero, Guillermo Rodríguez-Melgarejo, el cura sin embargo pronto se dio el gusto de subir al púlpito. Dio una primera misa el domingo 6 y a la semana siguiente comenzó a querer dar órdenes a la gente que participa en el trabajo social de esa parroquia.

“Se daba ínfulas. Empezó a preguntar quién se ocupaba a de esto y de lo otro, pero no con la actitud de un cura que viene a hablar tranquilamente con la gente. Se le notaban las insignias arriba del hombro”, definió a Página/12 una de las laicas del lugar. Así llamó la atención, googlearon su nombre y encontraron los antecedentes. La noticia corrió rápido.

Según varios testimonios, Zanchetta repitió ante la gente de la parroquia en una reunión de la Pastoral (cuando se reúnen los integrantes de Caritas y otras ramas del trabajo laico con el cura párroco) los dos argumentos que sostiene cada vez que es cuestionado. El primero es que “todo lo que se dice” sobre él “es mentira”. El segundo, que le “faltan pocos años” para jubilarse; “hasta entonces tengo que tener una actividad”.

El escrache

Los de JP Evita imprimieron volantes con la historia de Zanchetta y el domingo fueron a la misa de 11. Tal como lo esperaban, el cura estaba otra vez encargado de realizar el oficio. Los chicos se distribuyeron en la nave y escucharon buena parte del oficio antes de escracharlo. “En el sermón, dijo que Dios era como una empresa”, contó Carolina Bordón, que aun conociendo los antecedentes del personaje quedó impactada por lo burdo del estilo. “Además, como parte de la homilía preguntó a los que estábamos escuchando si creíamos que las elecciones en Chubut o el Ministerio de Economía nos iban a cambiar la vida, como para marcar que hay que prestar atención a la fe y no a la política.”

Cuando el cura terminó de dar de comulgar, largaron el escrache. Uno de los chicos se paró: “Vecinos, queremos contarles que esta persona que está dando la misa estuvo en la ESMA durante la dictadura”, dijo, mientras los compañeros repartían los volantes en los que se advertía que “en la iglesia de su barrio da misa un asesino”.

La denuncia ayudó a que la novedad circulara. En la comunidad ya había habido movimientos internos. La parroquia tiene una escuela primaria y el día anterior las madres de los chicos que van a catequesis los retiraron de la misa del sábado y anticiparon que no los harían tomar la primera comunión si era Zanchetta el encargado de realizar el oficio religioso. Y el domingo a la tarde, después del escrache, un grupo de la pastoral social fue a hablar con el obispo y le exigió que sacara a Zanchetta de la parroquia. Se fueron de la reunión con ese compromiso de parte de Rodríguez-Melgarejo y desde entonces Zanchetta dejó de ser visto en el lugar. Sin embargo, todo indica que sigue cumpliendo funciones en la parroquia de Caseros, para la escuela Nuestra Señora de las Mercedes.

 

Fuente Página 12